Cerrando este año queremos agradecer. Agradecer a la comunidad de La casa de madera y a la vida por nuestro crecimiento, por poder participar y compartir el camino de consciencia.
Agradecer a la comunidad por este año de grandes retos y de caminar juntos; por cada día, cada mensaje compartido; por los videos, historias, por la virtualidad. Por el gradual regreso a la presencialidad y por tantos momentos y vivencias durante el 2021.
Gracias a la vida y al camino propio por permitirnos estar aquí como terapeutas creyentes en nuevas maneras de SER humanos, rompiendo paradigmas, atentos y despiertos; viendo y practicando constante e incansablemente que en realidad SOMOS UNO:
que el colectivo es importante, que estar juntos y contribuir es URGENTE.
Expresamos nuestra gratitud infinita por lo dado y lo recibido. Y a partir de esta gratitud, reafirmamos nuestra dedicación y entrega dando sentido al camino que continua y a la vocación que tenemos como terapeutas; a partir de esta gratitud y esa experiencia vivida, vamos afinando lo que implica y significa estar aquí:
SER terapeuta
Ser terapeuta es ser herramienta,
Somos caminantes y compañeros de sendero.
Somos el ayudante para sostener la lámpara con que pones consciencia a tu interior, a tu historia y a tus anhelos más profundos.
Somos asistentes para que vayas retirando a tu modo y a tu ritmo el disfraz que te has puesto para pertenecer; el disfraz que sirvió tanto pero que hoy, talla y duele.
Somos quienes elevamos un rezo y pedimos por ti,
pedimos para que tu camino sea despierto, gozoso y verdadero.
Somos quienes creemos en ti cuando tu confianza esta rota, porque creemos en la vida misma y en su totalidad.
Somos el espejo honesto y despojado de juicio donde te observas,
Somos el canal vacío a través del cual la vida te acompaña y te mueve a transformarte.
Somos la prueba de que el corazón se encuentra intacto, aunque nuestras historias sean traumáticas y dolorosas.
Somos el registro de que cambiar es posible, de que la artesanía del alma es viable y valiosa, de que se puede sonreír en un mundo tan confuso, tan perdido y a la vez, tan PRECIOSO.
Somos la compañía, el reflejo y somos el parche,
nos vemos en ti y tu en nosotros,
Somos respiración compartida,
Somos compasión y respeto; confianza aterrizada y confrontación amorosa
Somos el espacio donde te das cuenta que sólo tú puedes construir tu presente y sólo tú sabes lo que quieres.
Somos el espacio donde reconoces que compartir es indispensable; que dar y recibir es parte de la magia de la vida y de tu nutrición.
Somos el espacio donde te das cuenta que no estás solo.
Nos transformamos juntos y crecemos juntos,
somos todos los colores
y ESTAMOS AQUÍ
La tarea de acompañar y hacer terapia es importante y necesaria, y a la vez REQUIERE estar despojada de importancia y de ambición; es un camino de VALENTÍA y HUMILDAD que en La casa de madera hacemos con talento, con dedicación, con pasión y sin duda, con constante AMOR.
¡Que termine lo que ha de terminar y que inicie lo siguiente!
Aunque hayamos perdido mucho o experimentado dolor durante el año, PERMITÁMONOS CELEBRAR incluso lo doloroso.
